El Ford Mustang GTD ha marcado un antes y un después en la historia de los muscle cars al convertirse en el primer modelo de una marca estadounidense en bajar de los siete minutos en el exigente circuito de Nürburgring Nordschleife. Este logro sitúa al GTD entre los coches de producción más rápidos del mundo.
Un Vuelo Bajo en el “Infierno Verde”
El pasado 1 de mayo, el piloto Dirk Müller logró un tiempo impresionante de 6 minutos y 52 segundos, superando la anterior marca establecida por el propio modelo en 2024. Esta vuelta coloca al Mustang GTD en el selecto grupo de superdeportivos que han dominado el mítico trazado alemán.
Ingeniería de Precisión con ADN de Competición
Debajo del capó, el Mustang GTD esconde un motor V8 sobrealimentado de 5.2 litros que genera más de 800 CV, acompañado de una caja de cambios trasera transaxle para una mejor distribución del peso. Su carrocería ha sido diseñada con aerodinámica activa, frenos de carbono-cerámica y una suspensión semiactiva adaptativa desarrollada con tecnología de competición.
Todo en el GTD está pensado para extraer el máximo rendimiento en pista, pero sin perder su identidad: la de un muscle car americano llevado al extremo.
Edición Limitada, Espíritu Ilimitado
El Ford Mustang GTD no solo representa un récord en la pista, sino también una declaración de intenciones: América puede competir cara a cara con los mejores superdeportivos del planeta. Su producción estará limitada a aproximadamente 1.000 unidades, y su precio lo posiciona como el Mustang más exclusivo y radical jamás fabricado.
Una Nueva Era para los Muscle Cars
El récord en Nürburgring no es solo un logro técnico; es una redefinición de lo que puede ser un muscle car en el siglo XXI. Con el GTD, Ford ha demostrado que el rendimiento puro, la ingeniería avanzada y la herencia americana pueden coexistir en un solo vehículo.